Autor: Jesús Rodrigo Fernández
El 10 de julio se realizó una reunión en la Sala de Juntas de la Gobernación de Santander, convocada por el gerente del Contrato Plan y con asistencia de un delegado de la Secretaría de Transparencia de la Presidencia y el Secretario de Planeación Departamental, por parte del sector oficial, y los representantes de la Fundación Participar, el Comité Transparencia por Santander, la Universidad Autónoma de Bucaramanga, la Comisión de Competitividad y la Sociedad Santandereana de Ingenieros, por parte del sector privado. El propósito de la reunión era la conformación del Comité de Transparencia del Contrato Plan de Santander, que tendrá inversiones, entre 2013 y 2018, por $6,1 billones en: infraestructura de conectividad, 16 proyectos; salud, agua potable, vivienda rural, 7 proyectos; y agroindustria y Turismo, 11 proyectos (www.dnp.gov.co/Gobierno/ContratosPlan/ContratoPlanDepartamentodeSantander.aspx)
Se incluyen en el Contrato Plan, entre otros: i) las concesiones de Cuarta Generación que adelantará ANI en Santander, ii) la terminación del portal Papi Quiero Piña de Metrolínea, iii) el Hospital San Juan de Dios de Floridablanca, iv) el Teatro Santander, v) Acualago, vi) la factibilidad de una planta procesadora de cacao y por supuesto vi) el mejoramiento de la red vial secundaria del departamento.
Aunque el planteamiento de los representantes de las entidades gubernamentales se encaminaba a que el Comité se ocupara del seguimiento a la ejecución, actividad de la mayor importancia, pero en la cual intervienen también los interventores y los supervisores, los asistentes manifestaron su interés y condicionaron su participación a que los procesos se vigilen desde la etapa precontractual, de tal manera que con pliegos bien elaborados, efectivamente se pueda escoger el mejor. Para ello es indispensable la suspensión de los procesos licitatorios de la red vial secundaria, cuyo monto se acerca al medio billón de pesos, que están en curso, pues de lo contrario no sería completa la labor y en ese caso resulta mejor no acometerla, para no convertirse en avalista de procesos que tienen fisuras en las condiciones para participar y en la forma de adjudicar.
En materia de transparencia es tiempo de pasar de la retórica a la acción. El señor Gobernador tiene la palabra.
Tomado de Vanguardia.com
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